Clubes privados de degustación y experiencias exclusivas para amantes del buen vivir en México

¿Quién dijo que solo en Londres se disfruta del vino con estilo?

Desde hace siglos, los clubes privados han sido templos del gusto refinado —y hoy, México está subiendo la apuesta con espacios de lujo para quienes viven con buen paladar y mejores intenciones .

La historia comenzó en el siglo XVII con gentlemen británicos buscando privacidad, copas llenas y conversaciones de altura. Hoy, esa vibra selecta vive en espacios como el icónico 67 Pall Mall de Londres, donde más de 4,000 miembros tienen acceso a más de 6,000 etiquetas de vino de todo el mundo. Pero la magia no se queda allá… también está pasando justo aquí.

Bienvenidos al universo de los clubes privados de degustación en México: santuarios modernos donde el vino, el whisky y la buena comida se mezclan con estilo, comunidad y un poco (o mucho) de exclusividad.

Una nueva tendencia con aroma a México

Los clubes privados de degustación están tomando fuerza en las principales ciudades del país. No son bares ni restaurantes de moda: son espacios curados donde solo entras con membresía (y buen gusto). Empresarios, chefs, artistas y foodies empedernidos se reúnen aquí para compartir su amor por lo bien hecho.

En CDMX, el club Table, es the place to be. Bajo la batuta de Food & Wine en español, ofrece cenas únicas con chefs como Jessica Koslow (de Sqirl en LA) o Pablo Salas, creador de la noche “Pork love” —sí, así de sabroso está el asunto.

¿Eres más de vino? Entonces lánzate al Club Cava Palacio o súmate a las selecciones personalizadas de El Club del Gourmet. También existe la Scotch Malt Whisky Society México, donde los amantes del buen whisky disfrutan joyas embotelladas en ediciones limitadas en su íntimo Salón Rosario en la Roma

¿Qué se vive dentro de estos clubes?

Aquí no vienes solo a tomar. Vienes a vivir.

Las experiencias van desde catas privadas con sommeliers certificados, hasta viajes enológicos por Ensenada, Querétaro o Napa Valley. Imagina visitar viñedos donde el mismísimo enólogo te abre la botella y te cuenta la historia detrás del vino mientras cae el atardecer… Sí, así de épico.

Las cenas maridaje son otro nivel: cada platillo está pensado para resaltar lo mejor del vino (y viceversa), guiado por un chef y un sommelier que te hacen viajar con cada bocado.

¿Prefieres la comodidad de casa? También hay catas virtuales: te mandan un kit a domicilio y conectas por videollamada con expertos que te llevan de la mano por los sabores del vino mexicano.

Además, si tienes tu propia cava, varios clubes ofrecen consultorías para organizarla como un pro y sacar el máximo jugo a tu colección.

¿Y cómo entras a este mundo?